La inflación en Argentina podría mostrar una nueva suba en abril de 2025, según estimaciones preliminares de economistas y consultoras. Los indicadores apuntan a un escenario donde los precios seguirían en alza, a pesar del discurso oficial que promete una baja sostenida.
Las políticas de ajuste del presidente Javier Milei, que incluyen recortes en áreas clave como salud, transporte y educación, mantienen a los sectores populares en estado de alerta. El consumo continúa en niveles muy bajos y los salarios no logran recuperar el terreno perdido frente al avance de los precios.
El último informe del IPC porteño marcó un 3,2% de aumento en marzo, lo que llevó el acumulado del año al 8,6% solo en la Ciudad de Buenos Aires. En paralelo, analistas privados prevén que la inflación nacional podría cerrar 2025 con una cifra cercana al 27,5%.
La situación económica complica la vida cotidiana de millones de familias trabajadoras. Los precios de los alimentos, medicamentos y servicios básicos muestran una tendencia alcista, mientras el gobierno prioriza el equilibrio fiscal y la liberalización económica.
Frente a este panorama, aumentan las críticas a un modelo que ajusta sobre quienes menos tienen y beneficia a los grandes grupos económicos.