En una jornada cargada de emoción y memoria, militantes de La Cámpora y de la agrupación H.I.J.O.S. decidieron reinstalar en el Espacio Memoria y Derechos Humanos de la exESMA la icónica foto de Néstor Kirchner bajando el cuadro del dictador Jorge Rafael Videla.
Este gesto simbólico ocurrió justo antes de la marcha del 24 de marzo, y marca el regreso de una imagen que había sido retirada en febrero por decisión del secretario de Derechos Humanos, Alberto Baños. La gigantografía había sido removida en silencio, despertando críticas y rechazo por parte de los organismos de derechos humanos.
La foto, que había quedado grabada en la memoria colectiva como un acto fundacional de la política de Estado en materia de memoria, verdad y justicia, vuelve a ocupar su lugar 21 años después, como una respuesta directa a los discursos negacionistas que comenzaron a proliferar desde la llegada del nuevo gobierno.
La reposición fue vivida con entusiasmo y orgullo por quienes se movilizaron en la exESMA, y funcionó como un acto de resistencia simbólica y de reafirmación del compromiso con los derechos humanos, en el marco del 49° aniversario del golpe de Estado.
