El gobierno chino respondió con dureza a las declaraciones del presidente ucraniano Volodymyr Zelensky, quien aseguró que ciudadanos chinos están participando activamente en la invasión rusa a Ucrania. Desde Pekín, exigieron cautela y evitar lo que calificaron como “comentarios irresponsables”.
El vocero del Ministerio de Relaciones Exteriores, Lin Jian, lanzó una advertencia velada sin mencionar directamente a Ucrania ni a su presidente. “Recomendamos a las partes implicadas que entiendan correctamente el rol de China y mantengan una visión clara sobre nuestra postura”, expresó Lin en una rueda de prensa.
Las tensiones crecieron después de que Zelensky afirmara que Kiev posee pruebas que vinculan a al menos 155 ciudadanos chinos con el frente ruso. Incluso mencionó que dos de ellos fueron capturados por el ejército ucraniano. Para el mandatario, esta participación representa una escalada directa del conflicto.
Como respuesta, China sostuvo que prohíbe a sus ciudadanos involucrarse en guerras extranjeras y reiteró que no apoya ningún tipo de intervención militar individual. “Siempre hemos pedido a nuestros nacionales mantenerse alejados de los enfrentamientos armados”, sostuvo Lin, negando de forma implícita las acusaciones ucranianas.
