El presidente Javier Milei confirmó la unión entre La Libertad Avanza y el PRO para las elecciones legislativas bonaerenses. Sin embargo, las diferencias estratégicas y declaraciones cruzadas entre ambos líderes generan incertidumbre en la coalición.
En un giro político significativo, el presidente Javier Milei anunció la alianza entre La Libertad Avanza y el PRO para competir en las próximas elecciones legislativas en la provincia de Buenos Aires. La decisión busca consolidar una fuerza unificada frente al kirchnerismo y otras expresiones opositoras.
A pesar del acuerdo, las tensiones entre Milei y Mauricio Macri no tardaron en emerger. El mandatario expresó sentirse traicionado por sectores del PRO, acusándolos de priorizar intereses personales sobre los del país. Estas declaraciones reflejan las diferencias internas que persisten dentro de la coalición.
Por su parte, Macri respondió destacando la importancia de la transparencia y la unidad, aunque sin confrontar directamente las acusaciones de Milei. El exmandatario enfatizó la necesidad de presentar una alternativa sólida y coherente para los votantes bonaerenses.
Mientras tanto, en el ámbito legislativo, la alianza enfrenta desafíos para coordinar estrategias y definir candidaturas. La falta de consenso en algunos distritos y las ambiciones personales de ciertos dirigentes podrían complicar la consolidación de la coalición de cara a los comicios.
La situación actual plantea interrogantes sobre la viabilidad de una alianza duradera entre La Libertad Avanza y el PRO, especialmente si las diferencias internas no se resuelven antes de las elecciones.
