El primer día sin cepo cambiario en Argentina marcó un fuerte salto en la demanda de dólares. Según datos del sector financiero, el lunes 15 de abril se compraron cerca de 600 millones de dólares, el doble del promedio diario previo, que rondaba entre 300 y 350 millones.
Esta explosión en la compra de divisas se dio tras el acuerdo con el FMI, que forzó al Gobierno de Javier Milei a levantar las restricciones. A cambio, llegó algo de aire financiero: respaldo de deuda, pero también menos controles en un mercado que respondió con una devaluación del 12%, llevando el dólar oficial a $1230.
Sin embargo, esta suba en la demanda no fue solo de pequeños ahorristas. Parte del volumen se explica por operaciones del sector agroexportador y por movimientos financieros como el dólar MEP y el contado con liquidación (CCL), aunque los números siguen llamando la atención.
¿Se mantendrá esta tendencia?
Los analistas advierten que no está claro si esta dinámica continuará. La demanda podría estabilizarse si se mantiene la cotización dentro de la banda controlada por el Banco Central. Pero hay un problema clave: el campo ya avisó que no va a liquidar divisas a este precio. Esperan que el dólar suba a $1400 para empezar a vender.
Además, el comportamiento de los ahorristas durante las vacaciones de invierno será un termómetro clave. Si el público percibe que el dólar oficial sigue “barato”, la demanda para turismo en el exterior podría crecer.
En resumen:
- La apertura del cepo generó una reacción inmediata: se duplicó la demanda de dólares.
- El mercado respondió con devaluación y expectativas cruzadas.
- La incertidumbre sigue: ¿estamos ante una tendencia o fue una reacción puntual?
- El comportamiento del campo y el turismo serán claves para lo que viene.
