El gigante tecnológico Google fue declarado culpable de prácticas monopólicas en el mercado de la publicidad digital por una jueza federal de Virginia, Estados Unidos. El fallo, considerado histórico, surge tras una demanda presentada por el Departamento de Justicia durante el gobierno de Joe Biden, junto a varios estados.
La jueza Leonie Brinkema determinó que Google utilizó prácticas anticompetitivas deliberadas para consolidar su dominio sobre los mercados de servidores de anuncios e intercambios publicitarios. Según el fallo, durante más de una década, Google habría integrado sus servicios y políticas contractuales para bloquear a la competencia y fortalecer su posición monopólica.
La sentencia obliga a la empresa a presentar en siete días un calendario con medidas correctivas. En respuesta, Google anunció que apelará: “Ganamos la mitad del caso y vamos a recurrir la otra mitad”, afirmó Lee-Anne Mulholland, vicepresidenta de Asuntos Regulatorios de la compañía.
El juicio aún no terminó: la próxima semana comienza la segunda fase, enfocada en el presunto monopolio de Google Search. Incluso se especula con una posible división de la empresa. Mientras tanto, Apple también enfrenta una demanda similar por presuntas trabas a sus usuarios para abandonar el ecosistema de la marca.