El futbolista argentino Alejandro Garnacho fue blanco de un intento de robo en su residencia de Altrincham, Manchester, el pasado 13 de marzo, mientras disputaba un partido con el Manchester United. Dos individuos encapuchados intentaron ingresar a su domicilio, pero se equivocaron de casa y fueron confrontados por un vecino y un paseador de perros, lo que provocó su huida. El incidente generó preocupación en el entorno del jugador y en el club.
Tras el suceso, Garnacho decidió poner en venta su mansión, valuada en aproximadamente 5 millones de dólares, lo que alimentó rumores sobre una posible salida del Manchester United. Aunque el club confirmó que su equipo de seguridad estaba al tanto del incidente, este se produjo en una propiedad adyacente a la del jugador. La relación entre Garnacho y el entrenador Rúben Amorim ha sido objeto de especulaciones, aunque el técnico incluyó al delantero en la reciente gira de pretemporada por Asia.
Este intento de robo se suma a una serie de incidentes similares que han afectado a jugadores del Manchester United, como Victor Lindelöf y Paul Pogba, lo que ha generado inquietud sobre la seguridad de los futbolistas en la ciudad. El club y las autoridades locales han reforzado las medidas de seguridad para proteger a los jugadores y sus familias.
