La Cámara de Diputados aprobó con amplia mayoría un proyecto que eleva en un 72% las jubilaciones mínimas y establece un bono mensual de 110 mil pesos. La iniciativa, impulsada por bloques opositores, busca recomponer el ingreso de los sectores más golpeados por la inflación. La votación expuso el aislamiento del oficialismo, que se opuso junto a sus aliados más cercanos.
Con 160 votos a favor y 72 en contra, la media sanción deja en evidencia el descontento generalizado frente al deterioro del poder adquisitivo de los jubilados. Mientras el Gobierno insiste en que no hay recursos, la oposición denuncia que el ajuste fiscal se está haciendo a costa de los sectores más vulnerables.
El proyecto establece un nuevo piso de haberes equivalente al 1,09 del valor de la canasta básica total para adultos mayores, además de una fórmula de actualización basada en inflación y salarios. El Ejecutivo, sin embargo, adelantó que no acompañará la medida en el Senado y amenaza con vetarla en caso de avanzar.
La diputada de Unión por la Patria, Eugenia Alonso, sostuvo que “el Gobierno abandonó a los jubilados”, mientras que referentes de otros bloques como Hacemos Coalición Federal y la UCR también remarcaron la necesidad urgente de recomposición. Desde el oficialismo, en cambio, se repitió el argumento del “déficit cero” como única prioridad.
Aunque el proyecto aún debe pasar por el Senado, la media sanción refleja el creciente malestar legislativo con las políticas de ajuste de Javier Milei. En plena crisis social, la puja por el presupuesto se transforma en una disputa sobre qué modelo de país se pretende sostener.