La bailarina y su elenco improvisaron una performance callejera tras la suspensión de su obra “Bloody Tango” por un corte de luz masivo.
La noche del jueves 22 de mayo, la avenida Corrientes se sumió en la oscuridad debido a un apagón que afectó gran parte del centro porteño. Entre las funciones suspendidas se encontraba “Bloody Tango”, el espectáculo liderado por Noelia Marzol en el teatro Broadway. Lejos de resignarse, la artista decidió salir a la calle y ofrecer un show improvisado junto a su elenco, regalando al público una experiencia única bajo la tenue luz de los celulares.
Visiblemente afectada, Marzol compartió su angustia en redes sociales, explicando que el corte de luz obligó a cancelar la función y que se encontraba en la penumbra junto a su equipo. Sin embargo, optó por enfrentar la situación con profesionalismo y empatía, saliendo a la vereda para hablar con el público que aguardaba novedades. Allí, anunció la suspensión de la función y ofreció reprogramaciones o devoluciones de entradas.
Lo que siguió fue un acto de entrega y pasión por el arte. Junto a su partenaire Jony Lazarte y el resto del elenco, Marzol interpretó una coreografía en plena calle, sin música amplificada ni luces profesionales, solo con la energía y el compromiso que los caracteriza. Los transeúntes y espectadores aplaudieron emocionados, reconociendo el gesto de la artista.
El momento coincidió con el cumpleaños de Donatello, hijo de Marzol, quien recibió el cariño del público con un espontáneo “Feliz cumpleaños” cantado en coro. La bailarina agradeció el afecto y destacó la importancia de mantener el vínculo con la audiencia, incluso en circunstancias adversas. “Como a nosotros nos sobran ganas de laburar, hicimos mini show en la calle”, escribió en sus redes.