La Iglesia Católica ha elegido a Robert Francis Prevost como su nuevo líder espiritual, quien ha adoptado el nombre de León XIV. Aunque nació en Chicago, Estados Unidos, su profunda conexión con Perú lo convierte en una figura emblemática para el país andino. Prevost vivió y sirvió en Perú durante más de tres décadas, adquiriendo la nacionalidad peruana en 2015 y desempeñándose como obispo de la Diócesis de Chiclayo hasta 2023.
Su labor en Perú fue ampliamente reconocida, siendo condecorado con la Medalla de Oro de Santo Toribio de Mogrovejo, la más alta distinción otorgada por el Episcopado Peruano, en agradecimiento por su servicio a la Iglesia en el país. Durante su tiempo en Chiclayo, Prevost se destacó por su cercanía con las comunidades locales y su compromiso con los valores de justicia social y solidaridad.
En sus primeras palabras como Papa, León XIV saludó emotivamente a su “querida Diócesis de Chiclayo”, demostrando que su vínculo con Perú sigue siendo profundo y significativo. Su elección ha sido celebrada tanto en Perú como en otros países de América Latina, donde se le reconoce como un líder que representa la universalidad de la Iglesia y su compromiso con las comunidades más necesitadas.
León XIV asume el papado en un momento de grandes desafíos para la Iglesia, pero su experiencia en Perú y su enfoque pastoral centrado en la inclusión y la justicia social ofrecen esperanza para una Iglesia más cercana a los fieles y comprometida con los valores del Evangelio.
