El volante del Napoli enfrenta un duro revés financiero tras la quiebra de la empresa de su novia, mientras brilla en la Serie A.
Scott McTominay, figura del Napoli y ex Manchester United, atraviesa un momento agridulce. Mientras lidera a su equipo en la cima de la Serie A, se ve envuelto en un escándalo financiero que involucra a su pareja, Cameron Reading, y a su suegro, Ashley Reading. Ambos dirigían Fortress Capital Partners, firma que acaba de declararse en bancarrota con deudas que rondan los 24 millones de dólares.
El mediocampista escocés habría invertido más de 2,8 millones de dólares en la compañía, entre aportes personales y a través de su firma de inversiones. Sin embargo, los liquidadores advirtieron que la recuperación será mínima: apenas 80 mil dólares. Además, la justicia británica investiga posibles fraudes vinculados a la venta de propiedades en Dubái y España por parte de Cameron y su padre.
A pesar del golpe económico, McTominay mantiene su nivel en el campo. Con 11 goles y 4 asistencias en 31 partidos, es clave en el esquema de Antonio Conte. Napoli lidera el torneo con tres puntos de ventaja sobre Inter, a falta de tres fechas. El escocés, de 28 años, se convirtió en ídolo en Nápoles y sueña con levantar el Scudetto, aunque fuera de la cancha el panorama sea mucho más complejo.