En medio de un conflicto por bajos salarios, el Ejecutivo condiciona una nueva propuesta a la suspensión de las medidas de fuerza por 48 horas, mientras los residentes mantienen el paro.
El conflicto salarial en el Hospital Garrahan continúa escalando. El Gobierno nacional, a través de la viceministra de Salud, Cecilia Loccisano, solicitó a los médicos residentes que suspendan las medidas de fuerza por al menos 48 horas para poder presentar una nueva propuesta salarial. Loccisano afirmó que existen recursos disponibles, pero que es necesario reorganizar su aplicación para mejorar la eficiencia del gasto.
Los residentes, que actualmente perciben salarios estancados en $797.061 por jornadas laborales que superan las 60 horas semanales, rechazaron la condición impuesta por el Gobierno. Tras una reunión con funcionarios del Ministerio de Salud, donde se discutió la posibilidad de un plus por productividad financiado con fondos propios del hospital, los profesionales decidieron mantener el paro y convocaron a una nueva asamblea para el próximo martes 3 de junio.
El Ejecutivo también ha señaló la existencia de ineficiencias administrativas dentro del hospital, apuntando a una planta de empleados administrativos y operativos que consideran excesiva en comparación con el personal médico. Esta situación generó malestar entre los trabajadores, quienes denuncian que, además de los bajos salarios, se enfrentan a intentos de desprestigiar su labor.